Hoy no se si me vas a leer.

Quizás ya estés incorporado. Quizás estés de vacaciones. O como aquí es Sant Esteve, quizás tengas todavía un festivo por delante. 

Yo sigo. Dándolo todo. Canelones. Cava. Turrón. Madre mía. En mi casa, e igual también pasa en la tuya, es como si estuviésemos todavía en época de posguerra.

Y es que hay tradiciones que nos cuesta soltar. Son carreteras en nuestro cerebro seguimos fortaleciendo año tras año. A lo loco. 

Y hoy repetimos de nuevo. Aunque de esto no va el mail.


Hoy quiero compartir una reflexión de estos días. Y hablarte de un atajo mental. Sabes que me flipan. Estos pensamientos que nos salen de forma automática con el fin de ahorrar energía.

Y hay uno de ellos que estos días se ve muy presente.

Reuniones familiares. Discusiones apasionadas. Sesgo de confirmación. 

Reuniones familiares. Discusiones apasionadas. Sesgo de confirmación.

Y este es el atajo mental por el cual nos es complicadísimo cambiar de opinión. ¿Lo has vivido con tu cuñado, tu primo o el suegro estos días? Seguro.

Fíjate.

Warren Buffet lo definía así lo que el ser humano hace mejor es interpretar toda la información nueva para que sus conclusiones anteriores permanezcan intactas.

Es decir, interpretamos la información de tal manera que queremos mantener nuestra idea o opinión que ya tenemos al respeto. Siempre.

Y es que buscamos todas aquellas ideas que favorezcan nuestras creencias, que confirmen lo que ya creemos y descarten lo que vaya en contra.

Y lo hacemos a menudo.

Religión.
Política.
Temas sociales.
Empresa.
Etece.

¿Y qué conseguimos?

Aprisionarnos en nuestras posturas e ideas.

¿Y cómo lo reforzamos?

Por un lado. Las cámaras de eco. Nos nutrimos de los medios que son afines a nuestras ideas o creencias. Así confirmamos nuestros pensamientos. Of course, baby.

Además, nos rodeamos y nutrimos de gente que piensa como nosotros. Creyendo así que la información es más veraz y pensamos que es aceptada por la gran mayoría.

Y por último, lo acentuamos con las redes. Siguiendo a unos u otros perfiles. Unos u otros medios. Y así vamos adquiriendo más y más información y ésta también está totalmente sesgada.

Y encima el algoritmo no lo pone nada fácil. Ni en redes. Ni en Google. Porque te sigue devolviendo más y más de lo que tú quieres leer, claro.

Menuda locura.


Y hoy sólo quería decirte esto. Por si te sirve para tus siguientes reuniones familiares. Quizás para la de hoy.


Recuerda que seguramente defiendas ideas que ni tan siquiera son tuyas.

Recuerda que es una locura decidir hoy en firme lo que vas a pensar para el resto de tu vida.

Recuerda que igual replantearse algunas cosas puede no ser tan mala idea.

Recuerda que quizás enfadarte sea la mayor de las locuras.


No sé si me he explicado. Paz y amor. 

 

Por fin es lunes. Un lunes diferente.

¡Disfrútalo!

Bibi

PD. Todos estos sesgos y lo más importante, cómo utilizarlo a nuestro favor, lo vemos en el curso Cómo funciona tu cerebro. Para más info, llámame. Hoy no. Esta semana tampoco. Bueno, mejor envíame un mail. A este mail.