Me encantaría empezar el mail contándote que era una tarde de invierno de estas frías y grises, la niebla cubría la ciudad… pero madre mía, con el calor que está haciendo no te pondría en situación.

Así que allá vamos.

Hoy te voy a contar un delito que se comete, día tras día, en la empresa. Un delito grave contra el crecimiento.

Fíjate con el caso de Ismael.

Ismael, es el director financiero de una mediana empresa. Ismael es un tipo que está comprometido con el crecimiento, tanto personal como de la empresa. 

Ismael, es curioso, observador, tiene una mente muy abierta y le gusta ver dónde puede estar la mejora. No es que sea un tipo fuera de lo común. Lo que es es un trabajador que tiene el foco en la oportunidad. Y en el crecimiento.

Así que corrijo. Esto le hace ser un tipo fuera de lo común. Y me gusta.

Ismael, además se forma por su cuenta, lee acerca de su actividad y también aprende sobre el sector y la economía en general. Le ambiciona estar al día. 

Ismael ha detectado cómo desde el departamento comercial se puede mejorar una situación que está provocando unos costes que se podrían evitar en el día a día de la empresa.

Hoy le ha pedido al gerente una reunión. Para exponerle el caso y como tipo implicado que es, exponerle también dos soluciones. Ni una ni tres. Dos ideas. Y buenas.

Y ¿Quieres saber la respuesta del gerente?

Ok, dame medio minuto más.

Ya te anticipo que es aquí cuando se comete un asesinato y la muerte de talento. Son casos graves que se están ejecutando a menudo. Y estamos haciendo como si no pasara nada. 

Cada día muere talento. Y ya no hay tiempo que perder cuando hablamos de mejora e innovación. Por eso de desarrollar todo el potencial y que la empresa siga creciendo. Sin demora.

Cada día mueren muchas ideas que podrían ser soluciones e innovación. Y por lo tanto, ¿qué? A estas alturas ya lo sabes, mejora en los resultados. 

Pero desgraciadamente muchas de estas ideas mueren asesinadas. Y otras directamente mueren por suicidio. 

¿Que porqué?

A saber. 

Puede que sea el orgullo de no haber tenido la idea uno mismo o puede que pensemos que gente que no es de nuestro departamento no tienen ni idea de lo que hablan y por lo tanto ni deben opinar.

Puede que sea porque se menosprecian ideas cuando uno siente que tiene la verdad absoluta y sabe cómo funcionan las cosas o puede que como la empresa ya va bien no se perciba la necesidad de cambio o de mejora.

O puede que simplemente no se escuche a los que están a primera línea del frente. Los que tienen toda la información. No es el caso pero también es muy habitual.

Y así día tras día tenemos fuga de talento. Asesinatos en toda regla y que se siguen permitiendo. 

Dicho esto, aquí te va la respuesta del gerente. 

Podría haber sido un yo no te pago por pensar.

Podría. Porque también es un caso habitual.

Pero esta vez ha sido…

¿Y porque te entrometes en los temas que no son de tu departamento, a caso no tienes suficiente trabajo con lo tuyo?

¡PAAAAAAAAMMMMMMM!

Antes te decía que algunas ideas mueren asesinadas. Otras mueren por suicidio, porque a la tercera vez que Ismael reciba esta respuesta -si es que llega a la tercera-, ya tirará él solito directamente la idea a la basura.  

Y algo que nos afecta a todos es que…

Sin innovación, no hay (r)evolución. 

Sin innovación, no hay (r)evolución. 

Sin innovación, no hay (r)evolución. 

Una vez más, podemos hablar de técnicas de generación de ideas, podemos hablar de técnicas de innovación y metodologías ágiles para que en tu organización haya innovación.

Ya sabes lo que disfrutamos en estas formaciones y los resultados que obtenemos si has realizado alguna de ellas conmigo.

Peeeeeeero déjame decirte que antes de todo esto, hay que tener un equipo preparado para la (r)evolución.

Primero hablemos de pensamientos, de emociones, de actitud y de equipo. Lo demás ya llegará.

Ya sabes que no tengo cursos de mindfulness en el trabajo. De mindfulness no, pero sobre cómo funciona la mente si, y todo esto lo vemos en él para que estéis preparados tu y tu equipo para la (r)evolución. 

Todavía es martes. Suerte.

Bibi

PD. Menos mal que cada vez somos más los que hemos decidido cambiar las reglas del juego. Y yo me alegro de que sea así. Paz y amor. Mucho amor.