No es lo mismo ser el técnico de reclutamiento que ser el jefe que despide al personal. No.

No es lo mismo ser diseñador de experiencias que ser el técnico de reclamaciones. No.

Y tampoco es lo mismo estar en un departamento creativo que estar de técnico en un helpdesk. No.

Imagínate un helpdesk de una multinacional. Donde todos acudimos cuando tenemos problemas con el software, el hardware o a saber.

¿O a caso has llamado tu alguna vez a tu informático para darle una buena noticia? Lo dudo.

¿Y cual es tu estado de ánimo cuando acudes al helpdesk? Debería ser agradable. Debería. Pero la realidad es otra bien diferente. 

Imagínate que estás en medio de una gestión con la que llevas un buen rato trabajando en ella, se te cae el programa informático y ya quien demonios sabe porqué, no te lo deja abrir. Desesperación.

Vas a entrar en la Intranet porque necesitas una información urgente, bloqueas sin querer el acceso porque no recuerdas la maldita contraseña y tampoco te la deja recuperarla. Desesperación.

Estás sacando los reporters de este mes de un proveedor con el que llevas al teléfono una hora y media y el sistema no te responde. Justo ahora. Desesperación.

¿Y donde acudes? A tus compañeros de helpdesk. Desesperado. Envías incidencia. Crees que sólo tu estás trabajando y si al minuto no te han respuesto. Allí estas. Y algo tenso. Es que además de tener prisa, puede que algo importante esté en riesgo.

Y como tú, todos los de la compañía. Todos. Algunos con más prisas, algunos muy impacientes, y otros quizás más desafiantes. Pero hay algo que tienen (casi) todos en común. Están de morros.

Y esto es lo que Álex, la jefa del departamento de helpdesk quería tratar en una formación.

Cuando la diseñé tenía dos objetivos concretos, uno, obtener herramientas de bienestar para los chicos del departamento, y, el otro, poder mejorar la comunicación con el resto de la empresa. Algo tensa.

Así que ¡marchando una formación donde combinamos bienestar con comunicación! Y también algo de equipo, para quererse un poco más entre ellos. ¡Oído cocina!

¿Y sabes cómo recuerdo aquella formación? Como una de las más transformativas que he vivido.

¡Aún siendo informáticos!

Adoro a los informáticos. Pero todos sabemos que son algo frickis. Cierto que no estuvieron del todo receptivos al inicio de la formación.

Quizás esperaban un manual e instrucciones más precisas de cómo iba esto de ser feliz en la empresa y mejorar las relaciones con los demás. 

Lo siento chicos. Esto no lleva manual de instrucciones.

Te podría contar miles de anécdotas y lo que disfruté en aquella formación. Pero sólo voy a compartir una idea contigo. La misma idea con la que decidieron quedarse ellos. 

Obtener una nueva mirada y empezar a mirar a los demás desde el I’M YOUR BIGGEST FAN.

Para mí es un mantra de vida. Me gusta mirar y admirar a la gente, y cuando lo hago desde esta perspectiva es muy fácil. Desde el pensar YO SOY TU MEJOR FAN.

Fíjate si me gusta que en algunas formaciones lo llevo en una camiseta. Bien grande, para que el otro lo sepa. Y puedes imaginarte el impacto que tiene en los demás cuando los miras desde esta perspectiva. Cierto.

Y este también era un objetivo de la formación. Que los del helpdesk empezaran a conectarse más con sus usuarios. Esos que venían, tensos, enfadados, de mal humor y que todo lo querían para ayer. Esos que no lo ponían nada fácil.

¿Y sabes qué pasó el último día de formación?

Aparecieron todos sin saberlo yo con esa misma camiseta, donde se habían vinilado el lema y el logo de la empresa y con el compromiso de mirar así al usuario.

Cada vez que veo la foto del equipo que nos hicimos con la equipación se me dibuja una gran sonrisa en la cara.

A veces cuesta más, a veces cuesta menos. Pero abrirse a nuevas perspectivas es uno de los mejores ejercicios que se puede hacer.

Sólo piensa que muchos de los pensamientos que tienes, muchísimos, no son tuyos. Son heredados, adquiridos de tu entorno. Así que no te apegues demasiado a ellos, quizás el cambio tan sólo de un pensamiento, significa un cambio brutal en tu vida.

Como lo significó para ellos. Gracias Álex. 

Hay miércoles muy tontos. Que no sea hoy uno de ellos.

Bibi

PD. Gracias mil por estar y recomendar la suscripción al mail. ¡Seguimos creciendo!.

PD2. Posdata sólo para valientes. Llama ahora a tu informático y dale las gracias por siempre estar. Sin más. A lo loco.